Diferencias entre osteopenia y osteoporosis
La osteoporosis es motivo de preocupación por el gran número de personas afectadas y por sus consecuencias más graves: las fracturas por fragilidad ósea. Sin embargo, la pérdida de masa y densidad ósea es un proceso lento, que puede detectarse mediante la densitometría ósea antes de llegar al nivel de osteoporosis. Veamos las diferencias entre osteopenia y osteoporosis y cuáles son los tratamientos para tratar a cada una de ellas.
Como se explicó en otras notas en el blog (Qué es la osteopenia y otras), la osteoporosis es un trastorno metabólico de los huesos, caracterizado por disminución de la masa ósea y de la mineralización del hueso, que llevan a mayor fragilidad y aumento del riesgo de fracturas.
La pérdida de densidad mineral ósea (DMO) se acentúa progresivamente a lo largo de años, a partir de los 50 años aproximadamente, si no se detecta temprano y se toman las medidas preventivas oportunas.
En realidad, la osteopenia y la osteoporosis son parte del mismo proceso, donde la osteopenia representa un grado menor de deterioro de la salud ósea que la osteoporosis. Por lo tanto, debe comprenderse que las causas, los factores de riesgo y las medidas preventivas generales son los mismos para la osteopenia y la osteoporosis.
¿Cuáles son las diferencias entre osteopenia y osteoporosis?
Las diferencias entre osteopenia y osteoporosis están en las definiciones propuestas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en base a los resultados de la densitometría ósea.
Las definiciones de la OMS se establecen considerando los siguientes parámetros:
- La DMO: es el parámetro más usado para valorar la masa ósea y se expresa en gramos por centímetro cuadrado (g/cm2).
- El puntaje T: es el número de desviaciones estándar (DE) de la DMO, por debajo del valor medio en la población de 20 a 39 años del mismo sexo. Con la edad, la DMO disminuye y el puntaje T se modifica.
Criterios de la Organización Mundial de la Salud basados en la densitometría ósea | |
Puntaje T | Definición de la OMS |
Entre +1 y -1 DE | Normal |
Entre -1 y -2,5 DE | Osteopenia |
< de -2,5 DE | Osteoporosis |
< de -2,5 DE y fractura relacionada con fragilidad ósea | Osteoporosis establecida |
< de -3,5 DE | Osteoporosis severa |
- Osteopenia: definida por puntaje T entre 1 y 2,5 desviaciones estándar por debajo del valor de referencia.
- Osteoporosis: definida por puntaje T más de 2,5 desviaciones estándar por debajo del valor de referencia.
- Cuanto más se aleja el puntaje T por debajo de los valores promedio, más grave la pérdida ósea y mayor el riesgo de fracturas. Este riesgo puede calcularse a 10 años, combinando los resultados de la densitometría ósea, los antecedentes clínicos familiares y los personales.
Para establecer el diagnóstico de osteopenia u osteoporosis se requiere la densitometría ósea, excepto en los casos en que ya se ha producido alguna fractura por fragilidad. La osteopenia y la osteoporosis son trastornos silenciosos, sin síntomas, por lo que es necesaria la sospecha para solicitar una densitometría ósea.
Las recomendaciones sobre quiénes deberían realizarse una densitometría pueden consultarse en la nota Densitometría ósea: a qué edad se realiza.
¿Hay diferencias en el manejo entre osteoporosis y osteopenia?
- Las medidas preventivas generales se centran en llevar hábitos de vida saludables: ingesta adecuada de vitamina D y calcio, actividad física regular, eliminar el tabaco, evitar el consumo excesivo de alcohol, cafeína y bebidas cola.
- Si se detecta alguna enfermedad que predispone a la pérdida de masa ósea, por ejemplo artritis, el médico puede tomar medidas más específicas, además del control adecuado de dicha enfermedad.
- La osteopenia y la osteoporosis pueden diferir en el manejo farmacológico.
- En caso de osteopenia, el médico evaluará la necesidad de indicar medicamentos según las causas de base y el riesgo de fractura calculado.
- Para la osteoporosis, se indican diferentes fármacos. Las dos clases principales son los agentes anti-resortivos que actúan atenuando la resorción ósea, y los fármacos anabólicos óseos que estimulan la formación de hueso.
- Entre los agentes anti-resortivos se encuentran los bisfosfonatos, el raloxifeno, el ranelato de estroncio y el denosumab.
- Los agentes anabólicos óseos son el teriparatide y la hormona paratiroidea de longitud completa (PTH 1-84).
Por último, podemos decir que el riesgo de fractura a lo largo de la vida puede llegar al 40% en las personas con osteoporosis. Las fracturas osteoporóticas implican muchas veces la pérdida de movilidad y autonomía, y la posibilidad de otras complicaciones cuando se requiere internación. La prevención de la osteoporosis es clave para reducir la carga de esta enfermedad.