Descubrí en este artículo cómo el tabaquismo afecta tu salud y la importancia de buscar ayuda para superar esta adicción. Conocé los riesgos a corto y largo plazo, así como algunas recomendaciones para dejar de fumar.
La Adicción al Tabaco es una realidad que plantea serios riesgos para la salud, desde consecuencias inmediatas hasta efectos a largo plazo que impactan la calidad de vida. Conocé más sobre este tema en Diagnóstico Rojas.
El tabaco es altamente tóxico, contiene más de 7.000 sustancias químicas, muchas de ellas cancerígenas. A corto plazo, el cigarrillo afecta:
A largo plazo, su impacto se vuelve más devastador. Las afecciones respiratorias como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), cánceres de pulmón, garganta y boca son los más comunes entre fumadores.
El riesgo de desarrollar cáncer debido al tabaquismo es alarmante. Cerca del 90% de los casos de cáncer de pulmón están relacionados con el tabaco. Además, el consumo de tabaco se asocia con cánceres de:
El daño cardiovascular es igualmente alarmante, aumentando el riesgo de infartos y accidentes cerebrovasculares.
La Adicción al Tabaco es causada principalmente por la nicotina, un compuesto químico altamente adictivo presente en los cigarrillos y otros productos de tabaco.
La nicotina actúa en el cerebro liberando neurotransmisores, como la dopamina, que generan sensaciones de placer y bienestar.
Con el tiempo, el cuerpo desarrolla una dependencia física y psicológica a la nicotina, lo que lleva a las personas a buscar y consumir tabaco de manera regular para mantener esos efectos placenteros y evitar los síntomas de abstinencia al cigarrillo, como irritabilidad, ansiedad y dificultad para concentrarse.
La duración de la adicción a la nicotina y sus consecuencias varían de persona a persona. La adicción a la nicotina puede desarrollarse rápidamente debido a su naturaleza altamente adictiva.
El tratamiento para la Adicción al Tabaco generalmente implica un enfoque multidimensional que abarca aspectos físicos, psicológicos y de comportamiento. Aquí hay algunas estrategias comunes:
A las 72 horas de dejar de fumar, el cuerpo comienza a sanar. La presión arterial se normaliza, la función pulmonar mejora y se reduce el riesgo de enfermedades cardíacas.
A medida que pasa el tiempo, el riesgo de cáncer disminuye gradualmente. La persistencia en la abstinencia es clave para disfrutar de estos beneficios a largo plazo.
El tabaquismo es una adicción que afecta profundamente la salud y el bienestar. Reconocer sus riesgos y buscar ayuda profesional para dejar de fumar es fundamental. Si querés hacerte un chequeo médico, ¡podés solicitar tu turno médico hoy mismo!
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