Explicaremos qué son las Aftas en la boca y los Herpes en los labios, sus síntomas y por qué pueden volverse crónicos. Conocé todos nuestros estudios en Diagnóstico Rojas.
La salud bucal es fundamental para nuestro bienestar general, y a menudo, nos encontramos con dos afecciones comunes que pueden causar molestias en la cavidad oral: las Aftas en la boca y el Herpes. La información es clave para una sonrisa saludable, y aquí encontrarás las respuestas que necesitás para tu bienestar bucal.
Las Aftas en la boca y el Herpes en los labios son dos afecciones comunes que afectan la cavidad oral, pero son diferentes en varios aspectos.
Las Aftas en la boca, también conocidas como úlceras aftosas, son pequeñas llagas dolorosas que se desarrollan en el interior de la boca, en la lengua, las mejillas o las encías.
Por otro lado, el Herpes, causado por el virus del Herpes simple, se manifiesta como ampollas o llaga labial o alrededor de la boca.
Las Aftas suelen ser pequeñas, ovaladas y de color blanco o amarillo rodeadas de un área enrojecida. Provocan dolor y molestias al comer o hablar.
El Herpes en los labios se caracteriza por la aparición de vesículas llenas de líquido que se rompen, formando costras. A menudo, causa picazón y es contagioso cuando las vesículas están presentes.
Las Aftas en la boca, en su mayoría, no suelen volverse crónicas y tienden a sanar en una o dos semanas. Sin embargo, en algunos casos, pueden reaparecer periódicamente, lo que se conoce como Aftas recurrentes.
En cambio, el Herpes labial, particularmente, el Herpes labial por estrés, puede tener brotes recurrentes debido a la reactivación del virus en momentos de debilidad del sistema inmunológico o situaciones de estrés.
Las Aftas en la boca, por lo general, se tratan con enjuagues bucales de venta libre o medicamentos recetados para aliviar el dolor.
El Herpes en los labios, por otro lado, puede tratarse con medicamentos antivirales para reducir la duración y la gravedad del brote.
Las Aftas no son contagiosas y no se transmiten al besar o compartir utensilios.
El Herpes labial, sin embargo, es altamente contagioso, especialmente cuando las vesículas están presentes. Evitar el contacto directo con las lesiones y no compartir objetos personales es fundamental para prevenir el contagio del virus.
Es importante aclarar que las Aftas no son un tipo de Herpes. Mientras que las Aftas son úlceras bucales no infecciosas, el Herpes labial es causado por el virus del Herpes simple, generalmente el Herpes simple tipo 1 (VHS-1).
Un brote de Herpes en la boca suele comenzar con una sensación de hormigueo o picazón en la zona afectada, seguida de la aparición de pequeñas ampollas que se rompen y forman costras.
Si experimentás lesiones bucales es esencial consultar a tu médico para un diagnóstico apropiado.
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