El cáncer de vesícula biliar es una enfermedad que afecta a un órgano crucial en nuestro sistema digestivo.
Aunque es menos común que otros tipos de cáncer, su detección temprana es fundamental para mejorar las posibilidades de éxito en el tratamiento.
Si bien es importante recordar que solo un médico puede realizar un diagnóstico preciso, conocer los signos de esta enfermedad puede ayudar a buscar atención médica de manera oportuna.
¿Cómo se desarrolla el Cáncer de Vesícula Billar?
El cáncer de vesícula biliar puede presentarse de diversas maneras, y los síntomas pueden variar según la etapa de la enfermedad.
Es importante tener en cuenta que estos síntomas también pueden ser causados por otras afecciones, por lo que es fundamental consultar a un médico para obtener un diagnóstico adecuado.
Síntomas más comunes asociados con el cáncer de vesícula biliar:
- Dolor abdominal: El dolor en la parte superior derecha del abdomen es uno de los síntomas más frecuentes, este puede ser constante o intermitente y empeorar después de las comidas.
- Pérdida de apetito y peso: Muchas personas con cáncer de vesícula biliar experimentan una disminución en el apetito y una pérdida de peso inexplicada.
- Ictericia: La ictericia es la coloración amarillenta de la piel y los ojos, esta se produce cuando el cáncer bloquea los conductos biliares y afecta el flujo de bilis, lo que lleva a un aumento de bilirrubina en el cuerpo.
- Náuseas y vómitos: Estos síntomas pueden ocurrir debido a la obstrucción de los conductos biliares y a la dificultad del organismo para procesar los alimentos adecuadamente.
- Cambios en las heces y la orina: Las heces pueden volverse más claras de lo normal, mientras que la orina puede adquirir un tono oscuro debido a la acumulación de bilirrubina.
Es importante tener en cuenta que la gravedad del cáncer de vesícula biliar puede variar según la etapa de la enfermedad en el momento del diagnóstico.
Diagnòstico del Cáncer de Vesícula Biliar
El diagnóstico del cáncer de vesícula biliar generalmente incluye una combinación de pruebas, entre las que se destaca la ecografía abdominal.
Este método de diagnóstico por imágenes utiliza ondas sonoras para crear imágenes detalladas de la vesícula biliar y los conductos biliares.
Además de la ecografía, se pueden realizar otros exámenes, como análisis de sangre, tomografías computarizadas o resonancias magnéticas.
El cáncer de vesícula biliar puede hacer metástasis en órganos cercanos como el hígado y los ganglios linfáticos.
Las metástasis se refieren a la propagación del cáncer desde su lugar original a otras partes del cuerpo, lo que puede dificultar el tratamiento.
La detección temprana es fundamental para mejorar las posibilidades de éxito en el tratamiento.
Por esta razón, es importante conocer los factores de riesgo y someterse a exámenes de detección periódicos.
Ante cualquier duda consultá con tu médico.