Los fibroadenomas son nódulos mamarios benignos. Este tipo de nódulos suele aparecer con mayor frecuencia entre los 15 y los 35 años. Sin embargo, pueden detectarse a cualquier edad y en cualquier persona que tenga períodos menstruales.
Si bien no suele provocar dolor, es importante que estés atenta a los cambios que puedas notar en tus mamas para acudir al médico y que evalúe cuál es la mejor forma de tratarlo.
Como dijimos antes, el fibroadenoma de mama no suele provocar dolor, pero tiene las siguientes características:
Si bien el tamaño promedio de este tipo de nódulos suele ser de algunos centímetros, estos crecen lentamente y pueden agrandarse con el tiempo.
Una mujer puede presentar un solo fibroadenoma o más de uno, en una o en ambas mamas. También, es relevante destacar, que algunos se reducen con el tiempo o cambiar de forma a lo largo de varios meses o unos pocos años.
Otro cambio de tamaño suele darse durante el embarazo, donde sí podría crecer y luego reducirse en la menopausia.
No olvides consultar con tu médico si sentís algo diferente al palpar tus mamas, como un bulto, un cambio en el tamaño o algún bulto que ya sabías que tenías de pronto se siente más grande.
Ante cualquier duda consultá con tu especialista. No te olvides de hacer tus controles anuales y autoexaminarte para conocer tu cuerpo y estar pendiente de posibles cambios.