Una ecografía abdominal es un estudio por imágenes que utiliza el ultrasonido para evaluar los órganos internos del abdomen, el hígado, la vesícula biliar, el bazo, el páncreas y los riñones.
También puede evaluar estructuras vasculares del abdomen, así como también estructuras del sistema linfático.
Se utiliza un ecógrafo, que se utiliza a través de un transductor la emisión y recepción de ondas sonoras de alta frecuencia. Este transductor se mueve por la piel del paciente, y por encima del órgano que interesa estudiar, generando imágenes de órganos y estructuras dentro del abdomen. El mismo ecógrafo a través del transductor recibe estas ondas y crea una imagen del órgano en estudio.
Cada órgano o tejido devuelve como un eco de sonido las ondas que por su propia estructura genera dada la densidad del tejido al cual está formado, por ejemplo, serán distintas las ondas que emita el hueso, los fluidos o el tejido adiposo.
Es una ecografía que se realiza acostado y se le aplica un gel conductor transparente a base de agua en la piel sobre el abdomen que sirve de medio para la transmisión del ultrasonido.
El medico puede necesitar cambiar la posición mientras realiza el estudio, para examinar diferentes zonas del abdomen, también puede solicitarle que contenga la respiración por periodos cortos durante el estudio.
Esta ecografía se puede solicitar para investigar la causa del dolor abdominal, infecciones renales, diagnosticar tumoraciones o ascitis, evaluar la presencia de litiasis en la vesícula o el riñón, entre otras posibles causas para la realización del estudio.
Se requiere que la persona se presente en ayuno de al menos 8 horas, a fin de facilitar la observación de todos los órganos a evaluar.
Es un estudio que genera poca o ninguna molestia. El gel conductor se puede sentir un poco frío y húmedo. Es un estudio en general rápido y que el paciente tolera muy bien.
Aproximadamente un estudio ecográfico abdominal dura alrededor de 30 minutos.
No existen riesgos para realizarlo, ya que no se está expuesto a radiación ionizante y tampoco es un estudio invasivo.
En la ecografía abdominal también se puede utilizar el Doppler para aumentar la valoración de los órganos en estudio, a través del estudio de su vascularización. En el transcurso del Doppler puede escuchar sonidos similares al pulso de una arteria.
Finalizado el estudio el paciente puede retomar sus actividades de manera normal y cotidiana.
Uno de los beneficios es su disponibilidad, su bajo costo, y no utiliza radiación ionizante
Se genera una imagen en tiempo real, siendo una herramienta que eventualmente sirve como guía de procedimientos mínimamente invasivos como biopsias por aspiración, y aspiraciones con aguja fina para drenaje de líquidos en el abdomen.
Tiene limitaciones para el estudio de los órganos huecos, es decir, el intestino y el estómago principalmente, ya que el aire o gas que contienen estos órganos reflejan el haz del ultrasonido e impiden la formación de una imagen clara del órgano.