Las mamas densas son una definición que se basa en las imágenes de la mamografía, cuando predomina el tejido glandular y fibroso. Sin embargo, las mamas densas dificultan visualizar posibles áreas sospechosas, por lo cual puede ser necesario realizar una tomosíntesis 3D u otros estudios por imágenes de las mamas.
La densidad de las mamas se determina únicamente en la mamografía y refleja la cantidad de tejido fibroglandular en comparación con la cantidad de tejido adiposo, según las imágenes mamográficas.
Tener mamas densas no duele, es una condición normal y frecuente. Para saber si tiene mamas densas es necesario hacerse una mamografía. La densidad mamográfica no tiene relación ni con el tamaño ni con la firmeza de las mamas.
En el informe de la mamografía se indica la densidad de las mamas. La clasificación propuesta por el American College of Radiology incluye cuatro tipos de mama, en grado creciente de densidad: desde compuestas prácticamente en su totalidad por tejido adiposo no denso, hasta extremadamente densas por el predominio absoluto de tejido fibroglandular. La mayoría de las mujeres con mamas densas presentan los tipos intermedios de densidad mamográfica.
Las mamas densas son normales y muy frecuentes en la población general. Aproximadamente la mitad de las mujeres con edad próxima a 40 años posee mamas densas. Para conocer más sobre las mamas densas, puede consultar la nota sobre qué hacer con mamas densas.
Las mamas densas no duelen; no es una categoría clínica sino radiológica. Sin embargo, el dolor o las molestias en las mamas suelen ser más frecuentes en las mujeres con mamas densas debido al predominio del tejido glandular; este tejido está sujeto a las fluctuaciones de las hormonas femeninas, lo que explica las molestias mamarias variables durante el ciclo menstrual. En general, el dolor o malestar es común en la parte externa de las mamas, donde hay más tejido glandular.
Si el dolor es localizado (puede señalar el sitio con la punta de su dedo) y persiste varias semanas, es aconsejable que consulte con su médico, debido a que puede tratarse de alguna otra condición: quiste mamario, ganglio linfático inflamado, infección (mastitis), etc. El dolor como síntoma único, muy rara vez se asocia con cáncer de mama. Su médico le indicará si requiere hacer algún estudio adicional en caso que el dolor le cause preocupación.
Los nódulos o tumores mamarios se ven de color blanco, por lo que el tejido denso mamario (que también se ve blanco) dificulta detectar posibles áreas sospechosas. En cambio, en las mamas no densas, es más sencillo visualizar un área de color blanco sospechosa sobre el fondo negro del tejido adiposo.
No se conoce el motivo por el cual, las mujeres con mamas densas tienen riesgo aumentado de cáncer de mama, comparadas con quienes tienen mamas no densas.
Antes que nada, converse con su médico. Cada persona posee diferentes antecedentes familiares y personales, estilo de vida o exposición a múltiples factores que influirán en las recomendaciones, además de que las mamas sean densas.
Si tiene mamas densas es importante que realice la mamografía de detección anual, según su edad.
En general el médico solicitará junto con el examen mamográfico una ecografía mamaria complementaria que permitirá distinguir si usted presenta alguna lesión sólida o quística. Casi siempre estos dos estudios (MMG y Ecografía mamaria) se solicitan en forma simultánea.
Otros estudios por imágenes pueden estar indicados como alternativa de la mamografía o para completar la evaluación: